sábado, 10 de mayo de 2008

No hay mejor realidad que la que se cree verdadera


Retomo el post del martes 6 de mayo para reiterar:
Estamos en un momento en el que todo parece que puede derrumbarse.
Pero habrá que ver hasta donde puede penetrar esa percepción en un contexto económico-financiero que NO es el 2001.
Comprendo que muchos quieran el caos para lograr negocios rápidos dentro de la timba financiera.
Pero destruir lo que rehicimos después de la explosión de 2001, da bronca, mucha bronca.
Ya aprendimos que desestabilizar gobiernos (o apoyar que así suceda) termina perjudicando al ciudadano de a pie.
Y ahí ganan los que tienen resto, los que no viven de un salario.
Si la clase media levantó temperatura con los Kirchner, que junte fuerzas para el año que viene y que vote como para humillarlos electoralmente.
Pero sumarse a la protesta del campo, puede ser una trampa.
Ahí hay demasiada confusión como para estar seguro de que se está apoyando una causa justa.
Los actores del campo argentino son de lo más variado, pero sus intereses comunes hacen que, a la hora de la fiesta de la soja, todos quieran estar en el mismo baile; como lo hizo hasta ahora el propio gobierno.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Está muy bueno el blog que propones y esta nota entre otras.
Es una mirada de la realidad muy sencilla y muy interesante!