Página/12 puso sobre la mesa el contrapeso justo para el debate público argentino acerca de los "males" que nos acechan en este 2009.
Contra la difundida y excluyente imagen mediática retratando a la gripe A y, en menor medida circunstancial, al dengue, el diario dice:
Nota completa, click en la imagen.En Argentina el Ministerio de Salud confirmó el martes 14 de julio que murieron 137 personas a causa de la gripe A y los fallecimientos ya superaron a los que se produjeron en México en donde, hasta ahora, hubo 124 decesos a causa de la gripe A H1N1. La pandemia de gripe A no es ni un invento ni una enfermedad menor.
Una de las manías del periodismo –que deberían evitarse– es minimizar un problema comparándolo con otro problema. Y a la gripe A no hay razones para minimizarla, sino, al contrario, para pensar medidas de prevención: que las embarazadas cuenten con licencia laboral y las madres con hijos en edad escolar también puedan faltar para cuidar a sus hijos/as sin escuela, que se aumenten las medidas de higiene en transportes y oficinas, que se puedan fabricar otros medicamentos sin depender de la patente de los grandes laboratorios y que todos los habitantes puedan acceder a agua potable y a jabón para poder lavarse las manos, como dice la regla número 1 de la prevención de la nueva gripe.
Sin embargo, la atención prestada a la gripe A H1N1 puede servir –sin opacarla– para priorizar también otros temas de salud pública olvidados. Por ejemplo, la mortalidad infantil que –por primera vez desde la década del noventa– aumentó el año pasado y tiene una de sus principales causas en la bronquiolitis, que es una enfermedad evitable (en muchos casos) y tratable con un sistema de atención de salud que pueda estar disponible para las enfermedades invernales que atacan principalmente a bebés o infantes.