miércoles, 15 de septiembre de 2010

Jóvenes que molestáis



Hablemos de jóvenes.

De estos jóvenes que son protagonistas en los medios.

Jóvenes que ponderamos o estigmatizados son protagonistas de un momento que muchos nos animamos a calificar como histórico.

Las emociones se combinan, se mezclan entre sí e incluso con la propia razón.

No es para menos: verlos en las calles, verlos movilizados detrás de un líder político, verlos “visibles” no es un dato casual de la realidad argentina.

Confieso que la movilización de los pibes y pibas del secundario unidos por el reclamo de escuelas dignas estuvo pasando ante mis ojos e intelecto casi como una noticia más.

Pero algo me hizo “click”.

Algo sucedió con estas imágenes vertiginosas de la realidad criolla para que la simple película informativa se transformara en documental viviente.

Son los jóvenes del presente los que invitan a discutir en términos políticos.

Ya lo dije: probablemente la prolongación de las tomas de escuelas porteñas sea parte de un derrape político de parte de la conducción de la protesta.

Pero, en todo caso, es un rasgo adolescente absolutamente lógico para quienes apenas empiezan a afeitarse la barba y a teñirse sus cabellos por primera vez.

¿Acaso en el exceso no se advierte la primavera de la edad?

Estos jóvenes modelo XXI molestan.

Fastidian a quienes no toleran la movilización popular: porque la repudiaron, porque no la hicieron, porque la aborrecieron como práctica social.

¿Les preguntaron a los detractores de los adolescentes qué opinan sobre protestas juveniles en países tan cercanos geográficamente como Chile?

Pero hay más datos de este presente que llevan a la reflexión.
Los jóvenes que anoche dieron la bienvenida a su líder Néstor Kirchner no puede ser un rasgo de la casualidad política.

Todo lo contrario.

No es particularmente el líder quien los atraiga: estoy convencido de que son las pendejas y pendejos que quieren vibrar en el protagonismo público buscando quien los oriente en su lucha.

Como lo fue Perón en el 45 con los trabajadores puede serlo Kirchner en el 2010.

Habrá que ver cómo anda la máquina del piloto del peronismo actual para bancarse una nueva carrera que se extenderá durante otros cuatros años.

De lo que no me cabe ninguna duda es de que quien esté pensando en ser elegido en 2011 ya no podrá prescindir de los jóvenes.

Sus discursos necesariamente necesitarán estar orientados a esas pibas y pibes:

Jóvenes que toman pero no solamente cerveza o vino

Jóvenes que toman escuelas.

Jóvenes que toman decisiones.

Jóvenes que se involucran en su propio destino.

Jóvenes que no son los mismos que soñaron con un cambio mediante la lucha armada.

Pero jóvenes, en definitiva, que creen que el cambio se logra mediante la participación colectiva, poniendo el cuerpo y alma propios.

Estos jóvenes no son lo que fuimos nosotros, los de 30 y pico, cuarenta o 40 y pico.

Son mejores, mucho mejores.

1 comentario:

Daniel Olivau dijo...

Holas.
Coincido. Los que hemos dejado de ser jóvenes hace unos años, los que nacimos y crecimos en la dictaura, el alfonsinato y el menemato, no fuimos así.

¿Y cómo ibamos a serlo? Sí desde chiquitos la política era mala palabra, y el miedo. Miedo por meterse en "cosas raras". Porque por ahí volvían los milicos, y ya sabés... Me avergüenza solo haber mascado bronca en indignación en silencio y solo.

No puedo dejar de maravillarme con la perspectiva de una nueva dirigentes que asoman. Es un gran momento para Argentina.

Disfruten el viaje.