sábado, 7 de junio de 2008

¿Qué será del periodismo?


¿Qué será ser periodista...

... más aún hoy, en el contexto del apriete empresario, el chantaje político y la autocensura profesional?

Es un difícil momento para mí hablar de profesión en toda su dimensión.

Siento que, desde mis poco más de 10 años como periodista profesional y como bloggero novato, algo está cambiando alrededor nuestro.

Y no sé hasta dónde nos estamos dando cuenta del cambio.

¿Estaremos haciendo un periodismo para la gente?

¿Estaremos reproduciendo noticias como cuando los albañiles descargan ladrillos de un camión?

¿Dónde entran nuestras ideas, nuestros pensamientos, nuestras propuestas, nuestras críticas al orden-de-lo-dado informativamente hablando?

¿Seremos pura alienación periodística?

¿Cuántos destinos cubren los cronistas de radios y televisión sin ningún tipo de fin estrictamente periodístico?

¿Cuántos hechos se transforman en noticia sin merecerlo?

¿Cuántos hechos DEBEN ser noticia y no lo son?

El aparato informativo que integramos, ¿será realmente aquel en torno al cual el público espectador pueda constituirse en ciudadano de un país plural, soberano y popular?

Este es un gran momento para poder someter a debate éstas y otras preguntas.

El medio está pagando poco, verdaderamente poco.

Si lo que tenemos que defender en nuestros puestos de trabajo no rinde ni para mantener a una familia tipo, más vale desatarse de semejante sometimiento gratuito.

Comprendo que en toda profesión existan mercenarios; pero el profesional rentando para combatir para una guerra ajena debe ser recompensado satisfactoriamente.

Si el periodismo se fue transformando en una profesión más, de las tantas que se ejercen por unas monedas, más que por la vocación cívica de informar, que sea por algo.

Pero NUNCA por nada o por poco.

Todo esto lo digo en el ineludible contexto de despidos en numerosos medios argentinos.

Si poco se paga, que poco se trabaje; si poco se paga, más vale que se prefiera el lugar en el cuál, lo que no se cobra, se perciba al menos con satisfacciones que vayan más allá de las económicas.

Por todo lo dicho, si se puede y no suena irrespetuoso, feliz día del periodista.

No hay comentarios.: