martes, 9 de octubre de 2007

La vida por un bondi: En La Matanza los vecinos lograron que la línea 162 vuelva a circular


Esta es una nota del sitio Infocívica, en la que se refleja el trabajo conjunto de vecinos de La Matanza para lograr que vuelva a funcionar la línea de colectivos 162.

Es un orgullo saber que hay vecinos como Viviana Caminos (a quien conocimos hace algunos meses en su lucha por el colectivo y por otros derechos más) que pelearon organizados para recuperar un servicio indispensables para cualquier barrio como lo es el transporte público de pasajeros.
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(INFOCÍVICA, Buenos Aires, 9 de octubre de 2007). Aquella añoranza de que volviera a pasar el 162 quedó en el olvido. Desde hace diez días, el recorrido lo cumple una línea de transporte propiedad de La Cabaña, y alrededor de 350 mil vecinos pueden viajar a Capital y estar comunicados entre los barrios que conforman el Partido de La Matanza.

"Celebramos que la solución llegó. No era lógico que un distrito con una densidad demográfica tan importante perdiera un medio de locomoción que unía a tantos vecinos”, comentó Mery Batch, integrante de Poder Ciudadano y responsable del proyecto.

Desde junio de 2006, esa entidad participó y acompañó a la asociación civil Generar en su lucha por recuperar el transporte, en el marco del proyecto “Inclusión cívica para la inclusión social: Empoderando al conurbano bonaerense”. La línea 298 que vino a reemplazar el servicio que antes de la quiebra brindaba la empresa Bartolomé Mitre, sale de Puente La Noria con destino a la estación Ciudadela. También se agregó otro ramal que llega hasta el Mercado Central.

La directora de Generar, Viviana Caminos, contó que esperaban que una empresa aceptara tomar el camino desde que la Dirección de Transporte de la Provincia llamó a licitación. “Que ahora pase el colectivo lo tomamos como un triunfo, un resultado positivo después de organizarnos entre varios barrios”, dijo. Mientras tanto, Batch amplió: “Este recurso facilita el acceso a la salud, al trabajo y a la educación”.

Las historias de los vecinos grafican la problemática de la pérdida de los servicios de transporte. Roberto Romero, por ejemplo, trabaja en una fábrica de Tapiales y, desde que había dejado de pasar el 162, volvía a su casa a pie: “Una tarde me robaron. Me sentía más seguro cuando contaba con un transporte que me llevaba a mi casa”, repasa.

Según Caminos, una de las escuelas más afectadas era la Media 13, de Villa Madero. Romina, es hija de Norma Gómez y alumna de esa institución educativa. La mamá dice que está contenta porque “Mi nena no va a llegar tarde al colegio y además, evitamos los gastos de remís”. Pero los alumnos y docentes de las escuelas no son los únicos que padecían la falta del servicio. También lo sufrieron las personas mayores que se atienden en la única clínica que PAMI tiene en el Partido, ubicada en Tapiales.

Ahora pintado de azul y amarillo, el nuevo servicio circula desde Puente La Noria o el Mercado Central, pasando por Villa Celina, Tapiales, Villa Madero, La Tablada, Lomas del Mirador y Ramos Mejía. En su trayecto, toma las avenidas San Martín, Crovara y Rivadavia, tres arterias muy transitadas que se caracterizan por ser zona de trasbordo, es decir que se puede combinar con otros medios de transporte.

Hasta 2002, circulaban dos ramales por el distrito más poblado del conurbano bonaerense. Uno de ellos salía de la avenida Cristianía hasta Chacarita y el otro desde el Mercado Central hasta Liniers. Ese año, la empresa quebró y durante un tiempo, los choferes se hicieron cargo del servicio hasta que fueron reabsorbidos por otras líneas.

La Cabaña informó que los colectivos pasan cada 20 minutos, pero aclararon que “cuando la gente se readapte al servicio y empiece a poblar las paradas, los tiempos de espera se reducirán al menos cinco minutos”.

“Estamos contentos porque reconocieron un derecho vital para el ciudadano común. Necesitamos un medio de transporte barato y rápido, para ir a trabajar, a un hospital o a la escuela”, comentó Alicia Turiano, integrante de las Entidades Representativas de Lomas del Mirador (CERLoMi), una de las organizaciones vecinales que se sumó a la convocatoria de Generar.

A pedido de Poder Ciudadano, Generar elaboró un informe, en el que se señalan los resultados obtenidos durante el desarrollo del proyecto: “Los vecinos y organizaciones sociales de los barrios que participaron conocen y utilizan creativamente herramientas de participación ciudadana para incidir en las políticas públicas y solucionar sus propios problemas “, indica.
Para eso, Generar se acercó a las sedes de las organizaciones de los vecinos, convocó a referentes barriales, elaboraron volantes con información que repartieron en la vía pública, entregaron una carta al intendente del Partido, Fernando Espinoza, y al Concejo Deliberante, y recogieron firmas.

Una vez más, la organización vecinal y el apoyo de instituciones cívicas, demuestran que el trabajo en conjunto sirve para solucionar los problemas que afectan la vida cotidiana de los ciudadanos.

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